viernes, enero 04, 2008

Flashback! "La Liga de los Caballeros Extraordinarios"


¡Saludos! En esta ocasión reseñaré un cómic que a mi parecer es una de las más grandes obras que este medio ha visto, pero que desgraciadamente será difícil ver publicada en nuestro país. Se trata de La Liga de Caballeros Extraordinarios, una publicación hecha en el año de 1999 por America’s Best Comics, escrita magistralmente por Alan Moore, a quien recordamos por su trabajo en “Batman: La Broma Mortal”, e ilustrada por Kevin O’Neill.

“La Liga de los Caballeros Extraordinarios” trata de una obra “steampunk”, un estilo de ciencia ficción muy bien definido: sus historias se ubican en la era de la Inglaterra Victoriana, a finales del siglo XIX. Ocurren en un mundo de contrastes, donde un grupo de personas tienen el poder y el resto está a su servicio de alguna manera; se trata de una era de invención, creatividad e industria, de imperios y expansión en la que por diversos factores existe una tecnología superior basada en la utilización del vapor (en inglés “steam”) como medio de locomoción, de ahí el nombre de esta corriente. La idea principal es la de un mundo con adelantos tecnológicos mas avanzados a los que realmente existieron, sin que estos dejen de tener un aspecto arcaico. El nivel tecnológico logrado es adjudicado a la existencia en esa “realidad” de personajes que con su intelecto marcaron una gran diferencia.
La historia de la “Liga de Caballeros Extraordinarios” es una mezcla de una gran cantidad de elementos de obras literarias de finales del siglo XIX y principios del XX, combinados con hechos y elementos verídicos. En esta, se nos narra el proceso de formación y la aventura por la que pasa un singular equipo de personajes, reunidos por el Servicio Secreto Británico.
El gran atractivo de esta obra es sin lugar a dudas, junto con la historia, el abanico de personajes que se utiliza, ya sea de forma protagónica o con simples apariciones breves.
Imaginen un grupo dirigido por la mujer que fue capaz de eliminar al mismísimo Drácula; un cazador de tesoros que encontró las Minas del Rey Salomón; el capitán de la más poderosa nave submarina, el Nautilus; un educado Doctor con una segunda personalidad sin inhibiciones de ningún tipo y fuerza animal y un psicópata a quien el ojo humano no puede percibir. Interesante.

Esta Liga de Caballeros, como anteriormente se mencionó, es conformada y auspiciada por el Servicio Secreto Británico, utilizando como intermediario a uno de sus agentes mas experimentados: Campion Bond, quien a la postre resulta ser abuelo de un James Bond, y cuyo jefe solo es conocido como “M”, ambos elementos obviamente extraídos del universo de James Bond, creación de Ian Flemming.

Al equipo se le encomienda la recuperación de un elemento denominado “cavorita”, el cual tiene propiedades anti-gravitacionales y que originalmente sería utilizado para emprender la carrera espacial con una “expedición lunar”, todos estos elementos de la obra “Los primeros hombres en la Luna”, de H.G. Wells, con la que el Reino Británico trataría de contrarrestar el esfuerzo de Francia de llevar a cabo una expedición similar por un Club de Balística, como es narrado en “De la Tierra a la Luna”, de Julio Verne.
El peculiar elemento no podría haber caído en peores manos que en las de un personaje de oriente, en ese entonces recientemente llegado a Inglaterra: Fu Manchu, mente maestra de origen chino con miras a conquistar al mundo, amo del bajo mundo y con su base de operaciones en la costa este Británica, como se narra en “El Misterio del Dr. Fu Manchu”, de Sax Rohmer. Nuestros héroes cumplen con su misión de recuperar la “cavorita”, frustrando así el plan de “El Doctor”, como se le llama a Fu Manchu, de bombardear Inglaterra en una maquina voladora con forma de dragón, impulsada por la cavorita.

Así pues al cumplir con su misión y entregar la “cavorita”, gracias a la intervención del Hombre Invisible, la Liga descubre que fue utilizada y que todo el tiempo han estado trabajando para un el Némesis de Sherlock Holmes, el Napoleón del Crimen; James Moriarty.

Como todo caballero cuyo honor ha sido herido, la Liga emprende una campaña en contra del Profesor Moriarty cuyos planes para la “cavorita” no eran diferentes: planeaba bombardear la costa este utilizando una máquina voladora en forma de un gran murciélago y así dominar al bajo mundo de Inglaterra. Nuestros héroes abandonan el Nautilus y recurren al “Victoria”, un globo encomendado al Capitán Nemo después de la expedición del Dr. Samuel Ferguson, llevada a cabo en “Cinco Semanas en un Globo”, de Julio Verne. En este globo los cinco personajes lanzan un ataque con características suicidas, impulsados por su lealtad a la Corona, al mismo tiempo que los súbditos de Fu Manchu hacen lo propio utilizando grandes cometas personales impulsadas por motores y armados con pistolas automáticas. En la confusión de este ataque masivo a la nave de Moriarty, nuestros protagonistas logran llegar a la fuente de poder y extraerla de su contenedor, lo que da como resultado que este elemento ascienda velozmente hacia el espacio, siendo abrazado fuertemente por Moriarty, que en su obsesión, trata de detener su preciado elemento.
La Liga logra apenas escapar, ya que de haberse tardado unos segundos más, habrían sido abandonados por el invisible Señor Griffin, que a punto estuvo de cortar la cuerda del globo Victoria y abandonar a sus compañeros en la nave que ya sin fuente de propulsión, se desploma.

En un final aparentemente feliz, se abren las puertas a una secuela, pues la última ilustración es la de una escena en la que se aprecia un cielo surcado por grandes bolas de fuego, como se describe en la historia “La Guerra de los Mundos”, de H.G. Wells, en la que los marcianos atacan la Tierra.
Esta es a grandes rasgos la historia relatada en seis números de La Liga de Caballeros Extraordinarios, es necesario que sea leída y tener conocimiento de literatura para apreciar todos los detalles, ya que aquí he mencionado los más representativos. Esta obra es la clara muestra de que los cómics no son exclusivamente para niños, sino para un público maduro.

Publicado originalmente el 18 de Junio de 2001

1 comentario:

Jorge Tovalín González-Iturbe dijo...

Cuando compré el primer tomo de XLG, me fascinó, pues es divertidísimo. A diferencia de la película, que aun teniendo al Amo del Universo (Sean Connery) es muy inferior,el cómic nos presenta a unos personajes super interesantes, y la mayoría de ellos bastante dañados emocionalmente. El tomo dos no lo he podido conseguir, pero recién compré el Black Dossier y parece que también será fabuloso.
Dato curioso: en Comicastle tuvieron algunos ejemplares, y cuando la tienda pidió más, se les negaron, ya que el primer envío de Black Dossier a México fue un completo error, ya que por alguna razón, su venta en nuestro país estaba prohibida. El resultado: de los 350 pesos que me costó, ahora el tomo lo consigues en casi 700, en la misma tienda, debido a la escasez, tan solo un mes después de haberlo comprado.